Para este proyecto, O2 en Alemania no se limitó a adquirir una solución que funcionara como un gestor de gestores que se integrase con sus sistemas de gestión ya existentes. Por contrario, la empresa pretendía sustituir por completo los sistemas de gestión de elementos en uso. Para proceder de este modo se requería un sistema con una interfaz directa a miles de elementos de red de distintos proveedores. Para lograrlo era necesario crear un conjunto de adaptadores de datos específicos.